Bienvenido al sitio oficial de Orden de la Serpiente, la organización ocultista más grande de Latinoamérica.
Orden de la Serpiente es la perpetuadora de un saber espiritual ancestral, transmitido a través de la sucesión de Maestros y Sacerdotes abocados a resguardar la verdad, la luz y los misterios sagrados.
Comprometida con el Hombre, con la sociedad y con la espiritualidad, Orden de la Serpiente trabaja en pos de la transformación de la conciencia y de la continua evolución del ser humano, colaborando en su búsqueda de la verdad y la elevación espiritual.
Orden de la Serpiente no cuenta con sedes, ni con iglesias ni con lugares de culto o de reunión, puesto que no pretende ser una iglesia, un culto, una nueva religión o una secta. Por el contrario, ODLS propone una difusión libre y sin barreras de la espiritualidad y de los saberes místicos que han sido rebelados al Hombre desde los albores de los tiempos. Aún así, la orden cuenta con miembros Iniciados y estudiantes de lo espiritual de todos los rincones del mundo.
Iniciados que, lejos de caer en los denigrantes estereotipos sectarios, aspiran al auto-descubrimiento, al auto-conocimiento, a la verdad, a la iluminación y a la plenitud física, mental y espiritual. La lectura, el estudio, la meditación y la adquisición de todo tipo de herramientas espirituales son las bases y pilares que sostienen al Iniciado, brindándole la capacidad de forjar su mente, su conciencia y de librarse de todo aquello que resulte dañino o perjudicial para su existencia.
Hombres y mujeres cultos y de buenas costumbres hacen a Orden de la Serpiente, comprometidos consigo mismos, con la sociedad y con la naturaleza, trabajando y evolucionando en pos de una mejor calidad de vida para ellos, sus familias y el entorno que los rodea.
No busque usted en ODLS un club social, una reunión de amigos aficionados, un pasatiempo o un sitio de perversión e inmoralidad. Orden de la Serpiente mantiene principios morales y filosóficos que busca inculcar a sus miembros e Iniciados a fin de contribuir en la formación de una sociedad con individuos con un claro discernimiento de lo moral y lo inmoral, del bien y del mal y que, lejos de convertirse en víctimas del control y la manipulación silenciosa de un sistema corrupto y malintencionado, sean capaces de hallar la luz y la sabiduría correcta que les permitan alcanzar un alto estado de elevación espiritual.
Hombre y mujeres libres, mayores de edad, de buenas costumbres y con un afán real y profundo de ser partícipes de un proceso de evolución de conciencia y de espiritualidad capaz de emanciparlos del mal y de la oscuridad.